Esto lo que hay que saber sobre las mortales explosiones de buscapersonas dirigidas contra Hezbolá
Por Euronews con AP
Publicado 18/09/2024 –
En lo que parece ser un sofisticado ataque a distancia, los buscapersonas utilizados por cientos de miembros de Hezbolá explotaron simultáneamente en Líbano y Siria, matando al menos a nueve personas, incluida una niña de 8 años. El Pentágono ha negado cualquier vínculo con el ataque.
Todo apunta a que detrás de este suceso hay una cuidada operación de inteligencia. Hay cerca de 3.000 heridos y al menos nueve fallecidos, entre los que se encuentra una niña de 8 años.
Un funcionario estadounidense dijo que Israel informó a Estados Unidos sobre la operación en la que se detonaron pequeñas cantidades de explosivo secretadas en los localizadores de miembros de Hezbolá. La persona habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizada a discutir la información públicamente.
El grupo militante respaldado por Irán culpó a Israel de las mortíferas explosiones, dirigidas contra un número extraordinariamente amplio de personas y que mostraban indicios de ser una operación planeada desde hacía tiempo. Los detalles sobre cómo se ejecutó son en gran parte inciertos y los investigadores no han explicado aún cómo se detonaron los ‘buscas’. El Ejército israelí ha declinado hacer comentarios.
Esto es lo que sabemos hasta ahora
El líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, había advertido anteriormente a los miembros del grupo de que no llevaran teléfonos móviles, ya que Israel podría utilizarlos para rastrear los movimientos del grupo. En consecuencia, la organización utiliza localizadores para comunicarse.
Un funcionario de la organización terrorista dijo a The Associated Press que los aparatos que explotaron eran de una nueva marca que el grupo no había utilizado antes. El funcionario, que habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado a hacer comentarios a la prensa, no identificó la marca ni el proveedor.
La empresa taiwanesa Gold Apollo comentó que había autorizado su marca en el modelo de localizador AR-924 y que una empresa llamada BAC producía y vendía los localizadores, pero negó haber fabricado directamente estos aparatos. Gold Apollo afirma que los localizadores que explotaron fueron fabricados por una empresa de Budapest.
Nicholas Reese, profesor adjunto del Centro de Asuntos Globales de la Escuela de Estudios Profesionales de la Universidad de Nueva York, ha explicado que los teléfonos inteligentes conllevan un mayor riesgo de comunicaciones interceptadas en comparación con la tecnología más sencilla de los buscapersonas.
Este tipo de ataque también obligará a Hezbolá a cambiar sus estrategias de comunicación, dijo Reese, que anteriormente trabajó como oficial de inteligencia, y agregó que es probable que los supervivientes de las explosiones del martes tiren «no solo sus buscapersonas, sino también sus teléfonos, y dejen sus tabletas o cualquier otro dispositivo electrónico«.
Operación orquestrada por Israel
A pesar de que un funcionario estadounidense confirmó que se trató de una operación planeada por Israel, han surgido múltiples teorías sobre cómo se pudo haber llevado a cabo el ataque. Varios expertos que hablaron con The Associated Press explicaron que las explosiones probablemente fueron resultado de interferencias en la cadena de suministro.
Es posible que se hayan incorporado dispositivos explosivos muy pequeños en los buscapersonas antes de su entrega al grupo, y que luego todos se hayan activado de forma remota simultáneamente, posiblemente con una señal de radio. En el momento del ataque, «la batería probablemente era mitad explosiva y mitad batería real«, dijo Carlos Pérez, director de inteligencia de seguridad en TrustedSec.
Un exoficial de desactivación de bombas del Ejército británico explicó que un dispositivo explosivo tiene cinco componentes principales: un contenedor, una batería, un dispositivo de activación, un detonador y una carga explosiva. «Un buscapersonas ya tiene tres de ellos», explicó el experto, que habló bajo condición de anonimato porque ahora trabaja como consultor con clientes en Medio Oriente. «Solo se necesita agregar el detonador y la carga».
«Una carga extremadamente pequeña y altamente explosiva»
Después de que el martes aparecieran en las redes sociales imágenes de una cámara de seguridad que supuestamente mostraban a uno de los buscapersonas explotando en la cadera de un hombre en un mercado libanés, dos expertos en municiones ofrecieron opiniones que corroboran la declaración del funcionario estadounidense de que la explosión parecía ser el resultado de un pequeño dispositivo explosivo.
«Al observar el video, el tamaño de la detonación es similar a la causada por un detonador eléctrico solo o uno que incorpora una carga extremadamente pequeña y altamente explosiva», dijo Sean Moorhouse, exoficial del Ejército británico y experto en desactivación de artefactos explosivos. Esto indica la participación de un actor estatal, dijo Moorhouse. Agrega que la agencia de inteligencia exterior de Israel, el Mossad, es el sospechoso más obvio de tener los recursos para llevar a cabo un ataque de este tipo.
N.R. Jenzen-Jones, un experto en armas militares que es director de los Servicios de Investigación de Armamento con sede en Australia, señala que Israel había sido acusado de llevar a cabo operaciones similares en el pasado. El año pasado, AP informó que Irán acusó a Israel de intentar sabotear su programa de misiles balísticos mediante piezas extranjeras defectuosas que podrían explotar dañando o destruyendo las armas antes de que pudieran ser utilizadas.
Un elaborado plan
Planear un ataque de esta escala llevaría mucho tiempo. Los detalles exactos aún se desconocen, pero los expertos que hablaron con AP compartieron estimaciones que van desde varios meses hasta dos años. La sofisticación del ataque sugiere que el culpable ha estado recopilando inteligencia durante mucho tiempo, explicó Reese. Un ataque de este calibre requiere construir las relaciones necesarias para obtener acceso físico a los buscapersonas antes de que se vendan; desarrollar la tecnología que se integraría en los dispositivos; y encontrar fuentes que puedan confirmar que los objetivos portaban los buscapersonas.
«Los buscapersonas funcionaron perfectamente durante seis meses», comenta Elijah J. Magnier, un veterano con base en Bruselas y analista de riesgo político. Lo que desencadenó la explosión, dijo, pareció ser un mensaje de error enviado a todos los dispositivos. Basándose en sus conversaciones con miembros de Hezbolá, Magnier también dijo que muchos buscapersonas no sonaron, lo que permitió al grupo chií inspeccionarlos. Llegaron a la conclusión de que entre 3 y 5 gramos de un material altamente explosivo estaban ocultos o incrustados en el circuito, dijo.
Hezbolá ha confirmado que al menos ocho miembros de su grupo fallecieron el martes señalando a Israel como el brazo ejecutor: «Consideramos al enemigo israelí totalmente responsable de esta agresión criminal que también tenía como objetivo a civiles (…) “con seguridad recibirá su justo castigo».